DIARIO DE UN ALMA DISLÉXICA

Es difícil pensar eso cuando tienes el corazón hecho pedazos y aunque sabes que es verdad no dejas de maldecir al mundo por mostrarte lo que habías estado buscando toda tu vida y te dice "no, gracias". Mierda, mierda y más mierda. Aún así quiero reirme, traigan la música estúpida y alegre! Que el tiempo se disuelva cuanto antes y los años se lleven este dolor de muelas en el corazón y entonces, cuando yo vea a alguien sufriendo así me pueda reir ya más libre de conciencia. Si creo que ya comienzo a sentirme mejor... si, creo que si.

Callate cabrón! No mames, casí había logrado empezar a recuperarme y ahora dices eso! Te odio, pinche Otto. Y ahora que hago? Existen lazarillos para la vida? O tendre que irme a tientas. Mi vida sigue sin sentido, desafocada, confusa y no pude evitar pensar en que ella era esa respuesta. Talvez si fué la respuesta, no todos tienen o pueden o quieren o deben estar acompañados. La soledad es mi sino y bueno, hay que aceptarlo.

Siempre pensé en que Clementina no vivía en mi país y que por eso no la encontraba. Por un momento pensé que había llegado pero ahora estoy seguro y creo que tendré que salir a buscarla, cerca del circulo polar. Talvez con ese ridículo sol de media noche o bajo una aurora boreal, el día que nos encontremos entonces podré reirme de estos días.